Poliomielitis: tras 49 años, la vacuna Salk sustituirá a la Sabin
El esquema vacunatorio federal que rige desde hoy constará de tres dosis antes del año de vida y un refuerzo en el ingreso escolar.
Desde hoy se dejará de aplicar la vacuna oral Sabin contra la poliomielitis en Argentina y sólo se utilizará la inyectable tipo Salk que constará de tres dosis a los 2, 4 y 6 meses de edad y un refuerzo en el ingreso escolar entre los 5 y 6 años.
A nivel local, la directora de Epidemiología de la Provincia, Angelina Bobadilla, admitió el cambio de esquema vacunatorio impulsado por la Nación en torno a la citada enfermedad y consignó que “vamos camino a la erradicación de esa patología”.
En tanto que Fernando Achinelli, infectólogo del hospital Llano, puntualizó a época que “es muy importante el hecho de retirar la vacuna Sabin oral como estrategia global, ya que debió posponerse porque en algunos países no contaban con la vacuna Salk inactiva. Esto es parte de la evolución sanitaria mundial y es muy positivo este cambio”
El año pasado, según datos de la OMS, en todo el mundo se notificaron 156 casos de polio y en sólo dos países, Afganistán y Pakistán, la enfermedad sigue siendo endémica.
En Argentina, el último caso registrado de poliomielitis fue en 1984, mientras que diez años después, en 1994, la región de las Américas fue la primera en ser declarada libre de la enfermedad.
“Hoy estamos todos muy emocionados al darle la despedida a las gotitas que nos ayudaron a terminar con la polio y que usamos en el país en operativos masivos desde el año 1971”, dijo ayer Mirta Roses, titular de la Comisión Nacional de Inmunizaciones.
La especialista, quien también es Directora Emérita de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), explicó que de ahora en más se utilizará sólo la vacuna inyectable tipo Salk, más completa que la Sabin y con menos posibilidades de generar complicaciones derivadas del propio virus que se utiliza en su elaboración.
De acuerdo a la Resolución 814 del 22 de abril, el Ministerio decidió modificar el esquema de vacunación siguiendo una recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Se estima, de acuerdo a datos de la OMS, que la vacuna pudo evitar más de 16 millones de casos de parálisis por el virus.
El nuevo esquema anunciado hace una semana por el Ministerio de Salud pasará de la actual oral bivalente (BOPV) más conocida como Sabin, a la vacuna inactivada (IPV) también llamada Salk.
Un aporte destacado
La vacuna Sabin comenzó a utilizarse en 1971. La facilidad para su aplicación, el bajo costo y la capacidad para combatir lo que se denomina “virus salvaje” en el estómago permitieron llevar adelante operativos masivos, las “claves de su éxito”, según Roses.
La primera vacuna desarrollada contra la poliomielitis, una enfermedad muy contagiosa que no tiene cura y afecta principalmente a los niños, fue presentada oficialmente el 12 de abril de 1955 por el presidente norteamericano Dwight Eisenhower y desarrollada por Jonas Salk. En Argentina, comenzó a aplicarse al año siguiente.
La enfermedad es producida por el poliovirus que se transmite a través de secreciones respiratorias o por la ruta fecal-oral, pero como el ser humano es el único reservorio, los casos de polio disminuyeron más de un 99% gracias a la vacuna.
La colocación de antigripales no se detiene
El Ministerio de Salud Pública de la Provincia dio a conocer que continúa con la campaña de vacunación antigripal “Salud va a tu casa”.
Recientemente los agentes recorrieron los barrios Ciudades Correntinas, Pirayuí y San Benito.
Además, la cartera continúa con la campaña de vacunación para completar el calendario regular de niños que asisten a los distintos comedores de la ciudad, dependientes del Ministerio de Desarrollo Social.
Este año la campaña antigripal se implementa con esa modalidad casa por casa debido a la emergencia sanitaria por el nuevo coronavirus.
De esta manera, los equipos de la cartera recorren los hogares aplicando las dosis correspondientes a los integrantes del grupo de riesgo: mayores de 65 años, menores de 6 a 24 meses, embarazadas en cualquier mes de gestación y puérperas, y las personas entre 2 a 64 años que padezcan alguna patología de riesgo como asma, diabetes, hipertensión o inmunocomprometidos, entre otros.