En abril, las jubilaciones y pensiones de haberes mínimos tendrán un aumento del 18%,

mientras que el resto recibirán un incremento del 27,35%.

Esto se debe a que el bono de $70.000 anunciado oficialmente se mantendrá igual, y el Gobierno no aplicará el incremento del 12,5% como compensación por la pérdida de diciembre-enero ni el 13,2% de la inflación de febrero sobre este bono. Con esta decisión, el Gobierno busca reducir el peso del haber mínimo en el total de ingresos y mitigar el achatamiento de la pirámide previsional. Los bonos no se integrarán al haber corriente y seguirán sin ajustarse para los siguientes aumentos.